Recientes excavaciones en el yacimiento de Cástulo, situado en Linares (Jaén), han revelado un fascinante hallazgo que podría ofrecer nuevas claves sobre la historia de la antigua ciudad romana.
Un pozo de 8 metros de profundidad, excavado en la roca arenisca, ha sido el protagonista de esta campaña arqueológica, desvelando monedas, cerámicas y restos orgánicos que datan de la época bajoimperial.
Los arqueólogos sugieren que el pozo pudo haber tenido una función ritual o simbólica, aunque esta teoría aún está bajo investigación.
El pozo, documentado durante las excavaciones de este verano, se encuentra en un área estratégica de la antigua ciudad, lo que ha llevado a los expertos a especular sobre su relación con un posible complejo mayor ubicado en un cruce importante de la ciudad.
Los materiales encontrados en el fondo del pozo, entre los que se incluyen carbones, huesos de animales y objetos de uso cotidiano como cerámica y monedas bajoimperiales, podrían indicar un uso múltiple, tanto práctico como ceremonial.
Marcelo Castro, director del conjunto arqueológico, destacó que, aunque el pozo podría haber tenido una función utilitaria, la acumulación de estos materiales sugiere que también podría haber estado vinculado a prácticas rituales, una hipótesis que será confirmada o descartada con las futuras investigaciones.
Cástulo pasó de ser un centro comercial activo a un espacio funerario
Además, las excavaciones en el cuadrante noroccidental de la ciudad han puesto al descubierto una serie de establecimientos comerciales y residenciales, incluidos talleres y tabernas romanas que combinaban espacio de trabajo y de vivienda.
En estos lugares se han encontrado utensilios domésticos y vajilla de cerámica y bronce, que apuntan a una actividad comercial vibrante antes del abandono repentino de la zona.
Este abandono, datado en el siglo V d.C., podría haber sido consecuencia de un terremoto, que afectó especialmente a los edificios donde vivió una comunidad judía en Cástulo. Tras este evento, la ciudad experimentó una transformación significativa, convirtiéndose en un espacio funerario.
Un ejemplo claro de este cambio es una tumba hallada en la zona, que contenía los restos de una joven cubierta con tejas, lo que sugiere el inicio de la reutilización de la ciudad como cementerio.
José Ayala, delegado de Cultura, señaló que este descubrimiento marca un punto de inflexión en la historia de Cástulo, revelando cómo la ciudad pasó de ser un centro comercial activo a un espacio funerario en el siglo VI.