Aunque ahora parece que ya lo hemos dejado atrás, lo cierto es que la situación meteorológica en Catalunya de hace unos meses era bastante preocupante. La falta de lluvia en el territorio catalán provocó que el pasado 1 de febrero de 2024 el Govern de la Generalitat tuviera que activar la situación de emergencia por sequía en Catalunya después de que la reserva de agua cayera por debajo del límite de los 100 hm3.
No obstante, tras las lluvias del mes de junio, el Govern decidió levantar la fase de emergencia en el sistema Ter-Llobregat, que abastece a unos seis millones de personas del área metropolitana de Barcelona y parte de Girona, y flexibilizar las restricciones.
Estado actual del pantà de Sau
Tras un mes de febrero en el que hemos tenido de todo en Catalunya, desde días especialmente fríos hasta jornadas pasadas por agua, el mes de marzo nos ha dejado una gran cantidad de chaparrones. Tras ello, vino un parón pero, sin ir más lejos, la primera semana de abril las nubes volvieron a descargar en muchos puntos del territorio catalán, y las previsiones prevén que volverá a hacerlo muy pronto.
Ahora, y teniendo en cuenta esas últimas lluvias, según datos de la Agència Catalana de l'Aigua, este viernes 11 de abril, las reservas en cuencas internas se sitúan en el 64,66%, superando ya de largo la mitad de su capacidad total, lo que supone una crecida de más de 33 puntos respecto al principio del episodio de lluvias de este mes de marzo. El volumen total de los pantanos en Catalunya se sitúa ahora en los 449,00 hm3, también más de 208 puntos por encima.
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En esta ocasión, es evidente que las reservas de agua en las cuencas internas han vuelto a notar los efectos de las últimas lluvias este viernes 11 de abril. De hecho, lo cierto es que los datos de este 2025 son mucho más esperanzadores que los del año pasado. A esta misma fecha, la capacidad de los embalses en el 2024 se situaba alrededor del 16%.