El Partizan de Belgrado visita este viernes (20:45 h) el Palau Blaugrana en un duelo crucial ante el Barça, con el que marcha empatado a 15 victorias en la clasificación de la Euroliga. Ambos equipos necesitan sumar el máximo de triunfos en las últimas seis jornadas de la fase regular para asegurar su presencia en los playoffs o, al menos, en el play-in.
El Barça sigue lamentando la reciente operación de Juan Núñez, que lo dejará fuera seis meses, pero podría contar con el regreso de Kevin Punter. El escolta ha estado cuatro semanas de baja por una lesión en el hombro izquierdo y ya completó parte del último entrenamiento con el equipo. “No está al 100%, pero si todo va bien, estará disponible”, explicó ayer Joan Peñarroya.
El equipo azulgrana sigue confiando en sus opciones en la Euroliga. La victoria de la semana pasada en Berlín les devolvió al play-in y todavía tienen margen para subir posiciones si aprovechan los cuatro partidos que les quedan en casa. El técnico Joan Peñarroya reconocía la trascendencia del partido y el buen momento del Partizan, al que considera “uno de los equipos más en forma de la Euroliga, solo por detrás de Olympiacos en los últimos dos meses”. El técnico azulgrana elogió la solidez de los serbios, su defensa física y su capacidad para robar balones, siendo el segundo mejor equipo en este apartado.
Obradovic: "El Barça siempre lucha hasta el final"
El entrenador del Partizan, Zeljko Obradovic, destacó la importancia del partido ante el Barcelona en el Palau, señalando que se enfrentan a cinco rivales directos en los próximos seis encuentros. “Trabajamos en la agresividad, clave para este y los siguientes partidos; el Barça tiene algunos problemas pero es un equipo que siempre batalla y lucha hasta el final”, afirmó. Por su parte, Sterling Brown anticipa un partido físico y confía en “el trabajo realizado en los entrenamientos para lograr un triunfo clave” en la clasificación
El técnico evitó calificar el duelo como una final, aunque reconoce que una victoria permitiría al Barça adelantarse en la clasificación y ganar el desempate directo. “Es un partido muy atractivo, pero aún quedarán cinco jornadas. Estamos bien situados y preparados para luchar”, afirmó el entrenador.
Una de las preocupaciones en el entorno azulgrana es la posibilidad de que el Palau vuelva a estar dominado por aficionados rivales, como ocurrió ante Olympiacos y Panathinaikos. “Sabemos que habrá muchos seguidores del Partizan, pero ya hemos demostrado que podemos sobreponernos a eso”, comentó Peñarroya.
Uno de los jugadores más motivados es Joel Parra, quien sí considera este partido como una final. “Estamos empatados y, si ganamos, les sacamos una victoria y el average. Sabemos que ellos llevarán muchos aficionados, pero este es un buen momento para que nuestra gente llene el Palau y nos apoye”, afirmó el alero, quien atraviesa su mejor momento desde que llegó al club. Sin embargo, dejó claro que su rendimiento personal no es lo más importante. “Esto es un deporte colectivo. Si yo juego bien pero el equipo no gana, no sirve de nada”, concluyó.
El equipo de Zeljko Obradovic llega con dos bajas: el alero alemán Isaac Bonga, por una lesión en la mano izquierda, y el escolta Mitar Bosnjakovic, cuya participación en el equipo es reducida. Sin embargo, la gran noticia para los serbios es la recuperación del base francés Frank Ntilikina, quien vuelve tras dos meses de ausencia por una lesión muscular. Ntilikina reapareció el pasado lunes en la Liga Adriática, jugando 17 minutos en la victoria del Partizan sobre el FMP Zeleznik (90-65), donde sumó 8 puntos y 4 asistencias