Valverde acostumbra a decir que la estadística posee muchos elementos de corte y que cada uno tiende a escoger el lado que más le interesa. En definitiva, que todo es muy subjetivo. Cierto es que el Athletic encadena cuatro compromisos sin encajar y que, junto con el Atlético, es la mejor defensa de las cinco grandes ligas europeas. El último gol que recibió fue el que le hizo la Roma, de penalti, en Bilbao y con la eliminatoria casi finiquitada. El anterior, de Raíllo en un córner para el Mallorca. El último tanto en jugada encajado por los leones fue el Shomurodov en el Olímpico el 6 de marzo.
Pero en el otro lado de la balanza aparece la sequía que asola al Athletic desde la entrada de la primavera. Se ha llevado el gol de la escuadra zurigorri. No logra mandar el esférico a las redes contrarias desde el 16 de marzo en el Sánchez-Pizjuán. Fue Yeray en una acción de estrategia. Desde entonces son tres empates a cero de forma consecutiva. Algo nada habitual. No les sucedía a los bilbaínos desde 1986.
La consecuencia derivada de ello fue la oportunidad que dejó escapar el Athletic en Glasgow. Quizá mucha gente hubiera firmado las tablas antes de empezar en el Ibrox Stadium, aunque no así. No jugando contra diez más de 80 minutos. No disponiendo de un penalti, con el infortunio de que venía de un gol que fue celebrado y anulado por el VAR. No terminando contra nueve por la lesión de Sterling. De todos modos, la semifinal está a una victoria de distancia en San Mamés frente al Rangers para los de Valverde.
La producción ofensiva del Athletic resultó escasa. Más allá de lo costoso que le resultó encontrar vías de agua en la firme y cerrada defensa escocesa, la realidad es que los leones no finalizaron bien sus ataques. Fueron 19 intentos de disparo y únicamente tres se dirigieron entre palos. Y en la segunda mitad, solo el penalti fallado por Berenguer.
El mérito del Athletic es cómo se ha ido repartiendo el pastel realizador. Hasta 18 efectivos han anotado en este ejercicio. Sin embargo, el peso lo tienen que seguir llevando los hombres de vanguardia y el bagaje de los puntas más específicos del conjunto rojiblanco no es del todo halagüeño. Guruzeta y Maroan solo llevan un gol por cabeza en este 2025. Ambos en el ‘siete’ al Valladolid.
El Athletic disparó 19 veces en Glasgow y únicamente tres fueron entre palos. En la segunda mitad, solo el penalti fallado por Berenguer.
El pichichi del Athletic de la pasada temporada acumula 7 dianas en 2.358 minutos. A una cada 337’. El fichaje de invierno suma una, la citada ante los pucelanos, en sus 524 minutos con la camiseta del primer equipo. Iñaki Williams también atraviesa un periodo de sequía. Sus muescas de este año se reducen a la lograda en Roma en la ida de octavos de Europa League y a la que cerró la cuenta con el Valladolid. Berenguer, por su parte, no marca desde enero en Vigo. Sancet, el máximo artillero con 14 goles, acaba de reaparecer y aún está corto de ritmo.
Los leones tratarán de reconciliarse con el gol mañana mismo ante el Rayo para afianzar más su candidatura a la Champions. Y también para recuperar sensaciones con vistas a la ‘final’ del próximo jueves contra el Rangers en San Mamés. Porque una cosa es segura, el Athletic tendrá que acertar con la portería escocesa si quiere mantener vivo el sueño del 21 de mayo. Eso o jugárselo en los penaltis con un nuevo 0-0. Algo que no parece una buena idea con el porcentaje de acierto desde los once metros. Especialmente con un cuadro británico que llegó a cuartos por esta vía.