Ocho victorias seguidas del Atlético de Madrid. Puede parecer sencillo, pero lo cierto es que ahora mismo en España no hay ningún equipo que pueda decir lo mismo que los colchoneros. El único que está en una situación parecida es el Athletic que encadena 17 partidos sin perder con cuatro victorias consecutivas. Curiosamente, su última derrota fue cuando los colchoneros visitaron la Catedral.
Una racha de triunfos que es más propia de los inicios del Cholismo. Ahora mismo es la tercera racha más extensa junto a la que logró en los primeros meses de 2018, tal y como les contamos ya a finales de noviembre en Mundo Deportivo. Si gana al Sevilla el próximo partido puede igualar la que logró de noviembre a diciembre de 2015. Aunque el mayor reto sería superar la de agosto a octubre de 2012 en la que logró 13 triunfos consecutivos. Una racha que tendrá que esperar a 2025. En 2024 ganando todo lo que le queda sumaría doce en total.
Unos números que comenzaron después de que los pupilos de Simeone tocasen fondo tras perder primero contra el Lille y unos días después frente al Betis. En Sevilla vivieron uno de los peores partidos de la temporada. Fueron claramente superados e incluso pudieron salir goleados. Y eso que Correa tuvo dos disparos al palo que pudieron igualar un encuentro en el que se merecieron volver con las manos vacías.
En ese momento de crisis, la Copa del Rey revitalizó a los colchoneros. Visitaron al Vic, un equipo amateur que juega en la Liga Elite catalana por debajo de Tercera RFEF. Allí, el Atleti no mostró su mejor versión. Ante un equipo en bloque bajo tuvo que esperar hasta el minuto 80 para abrir el marcador. Un marcador que se abrió por un discutido penalti sobre Giuliano que transformó Julián. Ya, en el tiempo de descuento, la ‘Araña’ hizo el segundo para sentenciar la eliminatoria.
Las sensaciones seguían sin ser buenas para recibir a Las Palmas. Un equipo que llegaba con tres victorias seguidas tras la llegada de Diego Martínez. Se ganó con solvencia pero sin brillantez gracias a un tanto de Giuliano y otro de Sorloth. 2-0 de nuevo.
Después de eso llegó uno de los puntos de inflexión que fue la visita a París. Allí los rojiblancos ganaron al PSG, uno de los cocos de la Champions, por 1-2 gracias a un gol de Correa en la última jugada del partido. Un triunfo que hubo que confirmar unos días después ante el Mallorca. 0-1 se ganó gracias a un tanto de Julián, en otro partido feo. Así se llegó al parón.
El regreso fue ante el Alavés. Simeone apostó por los jugadores que no habían ido con las selecciones y el partido se les atragantó por un gol a los seis minutos de penalti. Pero en el tramo final, Griezmann desde los once metros y Sorloth le dieron la vuelta al partido.
El equipo estaba con confianza y visitó a un Sparta Praga en horas bajas. Allí por primera vez unieron buen juego y resultados. El Atleti brilló y le endosó un 0-6 a los checos en el barrio de Letna. Unos días después visitaron a un Valladolid que tampoco estaba pasando por un buen momento, y sucedió algo similar. 0-5 en otro partido que dejó grandes goles como el de De Paul o Griezmann.
Una racha que amenazó de nuevo la Copa del Rey. El Cacereño se lo puso muy complicado a los colchoneros. De nuevo, hubo que esperar hasta los últimos minutos para que De Paul con un gol y dos asistencias le diera la vuelta al marcador.
Ahora, los de Simeone tienen tres partidos asequibles por delante, como son el que jugarán contra un Sevilla que sigue en horas bajas, un Slovan de Bratislava que aún no ha puntuado en la Champions, y por último, un Getafe al que le cuesta mucho sacar los partidos adelante. Los tres encuentros en el Metropolitano. La racha de once victorias es factible.
Otra cosa será la número 12 que es la que tienen que intentar cuando visiten Montjuic para medirse al Barcelona, que es el líder de la competición. Y ya, para igualar los récords de la primera etapa de Simeone habría que seguir con la racha en el 2025 cuando jugarán los dieciseisavos de final de la Copa ante un equipo por determinar, y luego le esperan Osasuna en casa y Leganés en Butarque.