Una semana después de que se confirmara el adiós de Matthijs De Ligt (25 años) del Bayern de Múnich tras no haber estado a la altura de lo esperado, se ha desvelado en el The Athletic que su marcha fue un motivo de discusión entre el club y Vincent Kompany.
Ya llevaba un par de temporadas tonteando el central neerlandés con su salida y al final los 45 millones de euros puestos sobre la mesa por el Manchester United lo han vuelto a reunir con Ten Hag, técnico con el que brilló en el Ajax de Amsterdam antes de dar el salto a la Juventus de Turín y de allí al Bayern.
Aunque no era un secreto que el conjunto bávaro deseaba desprenderse de él, Kompany quedó gratamente sorprendido en sus semanas de entrenamiento con él hasta el punto que pensaba como primera opción para la defensa e intentó transmitirle al club que no debía transferirlo, ya que quería contar con él.
Sin embargo, ya se sabe que en el Bayern de Múnich el peso de los directivos es mucho más importante que en otros lados e hicieron caso omiso al belga. La decisión estaba tomada aún incluso tras la petición expresa de 70.000 aficionados que reconsideraran su salida. Así que finalmente el club decidió apostar por Kim, Upamecano, Ito y Dier, los centrales a disposición en estos momentos para Kompany.