La firma norteamericana amplía su ecosistema de grupos Transmission con la llegada del nuevo SRAM GX Transmission electrónico, heredando toda la tecnología de los grupos superiores sin patilla de cambio pero a un precio mucho más contenido. El nuevo SRAM GX regresa para convertirse, una vez más, en todo un súper ventas.
SRAM es el absoluto dominador en cuanto a transmisiones electrónicas. Sus grupos AXS de accionamiento electrónico e inalámbrico han supuesto una auténtica revolución en el ciclismo, ya sea en carretera, gravel o, especialmente, en Mountain Bike.
Esta temporada está siendo clave para SRAM a la hora de dar un salto en la presencia de sus grupos electrónicos en el mercado. Primero fue la renovación del popular SRAM Force AXS y después con la esperada llegada de la nueva generación SRAM Transmission y sus tres grupos: XX SL, XX y X0.

Pero el producto que más impacto tendrá en el mercado será, sin duda, el nuevo SRAM GX Transmission que se presenta hoy y que en Solo Bici hemos podido probar desde hace semanas.
Historia de un cambio para todos los públicos
El grupo SRAM GX nació en 2015 como una alternativa más económica a los grupos de alta gama de la firma, de los que recuperaba buena parte de sus tecnologías. En 2017, dio un enorme salto cualitativo sumándose a la familia Eagle, es decir, con doce velocidades, un desarrollo hasta entonces solo disponible en los grupos más exclusivos.

Tal y como ha sucedido en anteriores ocasiones con el grupo SRAM GX, la nueva versión llega con interesantes novedades que incluso perfeccionan a los grupos ya existentes, todo ello con un precio notablemente más económico. Veamos en detalle cada componente, comparándolo con el resto de grupos Transmission ya conocidos y con la anterior generación SRAM GX Eagle AXS.
Cambio GX Eagle Transmission

Comenzamos por el cambio trasero. Es compatible con los cassettes T-Type y, como se aprecia rápidamente, adapta el sistema hangerless o sin patilla, con el cambio directamente anclado a ambos lados del eje trasero. El cuadro de la bicicleta que monte el nuevo SRAM GX Eagle AXS deberá ser, por tanto, compatible con el estándar UDH de SRAM.

Recuerda que el grupo SRAM GX siempre ha gozado de mucha popularidad por su alta resistencia, pues en esta nueva versión el cambio trasero se supera. La estructura del cambio está fabricada en acero, lo que aumenta su robustez, pero además se ha revisado la posición de la batería AXS para que quede más protegida frente a impactos.

Esta resistencia nos hace creer que el nuevo SRAM GX AXS volverá a ser uno de los grupos más habituales en la próxima generación de bicicletas eléctricas. Por cierto, la caja de cambio SRAM GX carece del sistema Magic Wheel que vimos en los grupos XX SL y XX que evitaba el bloqueo de la roldana inferior por atasco de barro o cualquier otro elemento.
El peso del cambio trasero es de 468 gramos sin la batería, un peso muy competitivo. Por ejemplo, es solo 28 gramos más pesado que el SRAM XX SL y pesa lo mismo que el SRAM XX. Si lo comparamos con el anterior GX AXS pesa 30 gramos más, pero recuerda que este cambio no requiere de patilla.

Y aquí viene lo bueno, su precio es de 480 €, muy lejos de los 700 € de las versiones XX lanzadas en primer lugar.
Cassette GX Eagle Transmission
Hereda el diseño X-SYNC que es la razón fundamental por la cual los grupos Transmission de SRAM son capaces de cambiar incluso mejor cuanta más presión se ejerza desde los pedales. Es compatible con una línea de cadena de 55 mm para obtener un ángulo de la cadena más suave, lo que se traduce en mayor precisión y más vida útil para los piñones.

Además, se ha optimizado el escalonado de los piñones superiores pasando de 38 a 44 dientes en el décimo y undécimo, algo que ya sucedía en los grupos Transmission de gama alta. Por cierto, este cassette cuenta con un revestimiento de níquel que permite un comportamiento más silencioso y además aumenta la durabilidad. Por supuesto cuenta con la marca roja que nos indica cuál es el piñón de ajuste durante su instalación.
El peso del cassette GX es de 445 gramos y aquí sí encontramos diferencias notables con las demás versiones. Es 100 gramos más pesado que el XX SL y 65 gramos más que el XX y el XO, aunque es 10 gramos más ligero que el anterior cassette GX de 10-52 dientes.

El precio de este cassette es de 300 euros, muy lejos de los 720 € del XX SL 660 € del XX o 480 € del X0.
Crankset GX Eagle
El juego de bielas está fabricado en aluminio forjado con un nuevo diseño más reforzado si cabe. SRAM ha desarrollado además una versión específica para e-bikes con longitudes de biela de 160, 165 y 170 mm y compatibles con motores Bosch y Brose. Las bielas convencionales estarán disponibles de 165 a 175 mm.

En cuanto al plato, es de anclaje direct mount de 8 tornillos y compatible con el sistema T-Type. Cuenta con un offset de 3 mm para la línea de cadena de 55 mm y está disponible en 30, 32 y 34 dientes, reflejando así su carácter popular.
Se pueden instalar dos protectores separados que protegen el plato y pueden actuar como guiacadenas.

Además del material de fabricación y el diseño, la principal diferencia del SRAM GX respecto al resto de grupos Transmission que conocíamos hasta ahora está en que este grupo carece de alternativas con potenciómetro integrado.
El peso del crankset GX completo, con bielas de 170 mm, plato de 32 dientes y el protector del plato es de 744 gramos.

Su precio es de 240 €, de nuevo mucho más económico que los 660, 600 o 360 € de los XX SL, XX y X0 respectivamente, en sus versiones sin potenciómetro.
Grupo completo
El grupo se completa con el mismo mando AXS Pod que ya habíamos visto en los anteriores grupos Transmission y una nueva cadena específica para el GX AXS, de diseño Flat top y compatible con su uso en ebikes. El precio de esta cadena, por cierto, es de 50 €, lejos de los 120 a 180 € de las cadenas de los grupos superiores.
Cerramos este análisis con un dato final que es esclarecedor. Si el anterior GX AXS democratizó el cambio electrónico por hacerlo más accesible, el nuevo SRAM GX Transmission sin duda acercará a un mayor número de aficionados el sistema Transmission con todas sus propiedades, ya que el precio del grupo completo es de 1.300 euros. Recordemos que los grupos anteriores sin potenciómetro ascendían a 2.650, 2.450 y 1.900 euros.

Si quieres conocer más detalles técnicos de cada componente del nuevo grupo, puedes acceder a la web oficial de SRAM.
En marcha
Merece la pena detenernos en el montaje del nuevo SRAM GX Transmission antes de desgranar su comportamiento en marcha. SRAM ha logrado que el montaje de los nuevos grupos T-Type sea francamente sencillo, aunque es importante tener presente que es necesario conocer la compatibilidad del cuadro sobre el que se monta.
Así, aunque desde la app móvil podemos acceder rápidamente a la configuración del grupo con la bici en cuestión, desde la web de SRAM se puede comprobar qué longitud de cadena exacta debemos cortar y el modo de configuración (A o B) de la caja del cambio en base al cuadro y el tamaño del plato donde se instalará.

Una vez montado, tal y como intuíamos, el nuevo SRAM GX Transmission deja una estética casi calcada a la del resto de grupos T-Type, una sensación que se acrecienta por compartir el mismo pulsador. Además, se aprecia la mayor robustez de todos los componentes del grupo en general, desde el cambio, hasta el cassette, pasando por las propias bielas. Si en SRAM aseguraban una resistencia a imapctos de 90 kg en los primeros grupos presentados, en esta versión se ha reforzado más si cabe la estructura frente a impactos y de cara a prolongar su durabilidad.

No queremos ocultar que se percibe un tacto ligeramente más seco y menos ‘fino’ que con el anterior GX. Incluso la respuesta desde el mando no parece tan inmediata. Pero lo que no tiene comparación es la robustez y eficacia del cambio sometido a gran tensión. Tal y como advertimos con el SRAM XX, las nuevas tecnologías de SRAM han dado un salto tan grande que han cambiado la forma de gestionar los cambios. La cadena responde a cada nuevo engranaje incluso si estamos inmersos en una ascensión de gran pendiente, olvidándonos de la clásica pedalada débil para no forzar demasiado la tensión.

En definitiva, si te gustaron las cualidades de los grupos Transmission presentados en primer lugar, pero pensaste que su rango de precio era prohibitivo, SRAM ha logrado que los grupos de cambio sin patilla puedan estar presentes en más bicicletas de serie y como kits completos a disposición del consumidor, a un precio incluso inferior a la mitad que en la alternativa tope de gama.

En Solo Bici, no obstante, seguiremos utilizando el SRAM GX Transmission en los próximos meses para ofreceros una review en profundidad tras un test de larga duración.