Una expedición china conquista una de las montañas vírgenes más altas del planeta

ALPINISMO

Los alpinistas chinos Liu Yang y Song Yuancheng hollaron el Karjiang, situado en el Tíbet, hasta ahora el cuarto pico inexplorado más alto del mundo a sus 7.221 metros

La cumbre del Gangkhar Piensum, a 7.571 metros de altitud

La cumbre del Gangkhar Piensum, a 7.571 metros de altitud

Wikimedia Commons

La reciente conquista de una de las montañas sin escalar más altas del planeta por los alpinistas chinos Liu Yang y Song Yuancheng, un Karjiang que se eleva hasta los 7.221 metros en el Tíbet, ha vuelto a poner de relieve está curiosa carrera por hollar las grandes cumbres vírgenes del mundo. Después de múltiples intentos y un último apretón final el pasado mes de agosto, esta pareja logró tachar de la lista este pico, por entonces la cuarta cumbre más alta jamás reclamada por el ser humano.

La nueva lista actualizada sigue estando comandada por el Gangkhar Puensum, situada entre Bután y China y con una altitud de 7.570 metros. Le siguen el Summa Ri, de 7.302 metros, situado en Pakistán, y el Apsarasas Kangri, de 7.243 metros, en la India. Dentro del Top 5 le siguen ahora el Tongshanjiabu (7.207 metros), situado en la misma zona del Gangkhar Puensum, y el Skyang Kangri West (7.174 metros), situado en Pakistán.

Todas las montañas vírgenes dentro del Top 10 en altura superan los 7.000 metros de elevación sobre el nivel del mar, si bien hay algunos picos que presentan dudas sobre la validez de posibles expediciones que sí alcanzaron la cima.

En el caso del Karjiang, una expedición japonesa intentó hollar la montaña en los ochenta, conquistando finalmente su pico sur a unos 200 metros de elevación menos. En 2001, un equipo neerlandés abortó su intento de hacer cima y se conformó con hace cumbre en la arista noroeste y en el Kangmi Karmi vecino, a  6.412 metros de altitud, según informa Explorersweb.

Cabe recordar que los 14 ochomiles del planeta tierra sí han sido conquistados, y todo apunta que estas montañas sin huella humana terminarán cayendo con el paso del tiempo ante la inevitable curiosidad que despierta el poder hollar, por primera vez, un pico hasta el momento inaccesible.

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