Mal partido del Athletic y punto

Mal partido y punto. El Athletic desaprovechó una gran ocasión para regresar a la zona Champions ante el Almería, el colista de Primera que todavía no ha ganado partido alguno en Liga y que jugó con un hombre menos durante más de media hora de partido. Ni por esas.

No tuvieron su noche los leones. Amagaron con una salida prometedora, pero poco a poco fueron difuminándose en un desesperante quiero y no puedo. Los bilbaínos no acabaron de dar al partido el ritmo que más les convenía y acabaron estrellándose contra el portero local de partida y contra un poste, en un remate de cabeza de Raúl García, cerca del final. La cosa pudo ser peor todavía, puesto que al filo del tiempo reglamentario Marezi, tras un buen contraataque, remató al palo con Unai Simón ya batido.

Valverde no acertó esta vez con la sala de máquinas. Vesga dista mucho de atravesar por su mejor momento y Galarreta, que siempre deja detalles, tampoco es el mismo del arranque de temporada. La solución sobre la marcha consistió en recurrir con uno más a Muniain, Raúl García, Ander Herrera, Sancet y Adu Ares mientras Beñat Prados, el medio que quizás más hubiese necesitado el equipo, se pasaba todo el partido en el banquillo.

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Este triste empate a cero deja a los bilbaínos quintos en la tabla a dos puntos de distancia del cuarto, el Atlético de Madrid. El Betis, sexto en cuestión, se queda, eso sí, a ocho puntos de diferencia. No todo fue negativo en la noche de ayer.

Sorpresas en el once

Garitano afrontó la visita del Athletic con cuatro cambios respecto al once que venía de perder en Mestalla. El técnico local se vio obligado a apostar por Edgar y Radovanovic como centrales con Baba y Robertone en la media y Lozano en punta.

Valverde también tuvo que tirar de plantilla dadas las ausencias de Vivian, Nico Williams y Guruzeta. Yeray, Berenguer y Villalibre ocuparon las plazas vacantes dentro de una alineación con Vesga y Unai Gómez como novedades. El Athletic apretó de salida, aunque sin generar llegadas al marco de Maximiano. El Almería también probó suerte desde fuera del área. El choque se fue igualando más si cabe con el discurrir de los minutos. Villalibre y Paredes fueron los primeros en poner a prueba al portero portugués y éste respondió con acierto y eficacia en ambas ocasiones. El Choco Lozano también tuvo la suya al borde del descanso, pero remató mansamente de cabeza a las manos de Unai Simón.

La segunda mitad arrancó con Muniain y Raúl García en el once bilbaíno. Garitano también tiró pronto de banquillo, pero obligado. Lopi cayó lesionado y Melero ocupó su sitio. No fue el único contratiempo para los locales, puesto que Ramazani fue expulsado por doble amonestación al cumplirse el minuto 53. Pese a la superioridad numérica, el Athletic siguió siendo incapaz de generar ocasiones de peligro.

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Valverde, en tales circunstancias, recurrió de manera simultánea a Ander Herrera y Sancet. El técnico local, por su parte, introdujo un cambio por línea tratando de dar oxígeno a su equipo. El panorama no varió un ápice, por lo que Adu Ares vino a cerrar el carrusel de cambios visitante. Raúl García tuvo el gol de la victoria en su cabeza a un suspiro del final, pero su remate de cabeza se estrelló en el poste.

La respuesta local fue inmediata y terminó de idéntica manera, puesto que el contraataque culminado por Marezi se fue fuera tras rebotar en la madera. Otra vez será.