El inicio del Mundial de F1 es de momento decepcionante para Fernando Alonso, que ha tenido que abandonar en los dos primeros Grandes Premios de la nueva temporada, en Australia y China.
El domingo pasado, en el circuito de Shanghai, el piloto asturiano se vio obligado a retirarse tras completar solamente cuatro vueltas después de que le fallaran los frenos de su Aston Martin.
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"Tuvimos un problema con el freno. Los frenos de atrás estaban muy calientes desde la primera vuelta, sobre todo en la última antes de retirarme, pisé al freno en la curva 1 y el pedal se fue al fondo, sin ningún tipo de frenada, y menos mal que es una curva que es muy larga y que vas frenando al bajar de marcha y con el freno motor. Si llega a pasar en la curva 13 o 14 creo que me hubiese llevado por delante a 5 o 6 coches. Quedarte sin frenos en un F1 es de las peores cosas que pueden suceder", explicó Alonso en DAZN.
Alonso es uno de los seis pilotos que aún tienen su casillero a cero en la clasificación, junto a Isack Hadjar, Pierre Gasly, Liam Lawson, Jack Doohan y Gabriel Bortoleto. Lance Stroll, el compañero de Fernando en Aston Martin, es octavo con 10 puntos.
Fernando Alonso, pilotando su Aston Martin en el circuito de Shanghai
A los problemas técnicos Alonso añade ahora un nuevo contratiempo en su aproximación a la tercera prueba del Mundial, el GP de Japón que se disputará en el exigente circuito de Suzuka. El piloto español confesó que ya corrió en Shanghai con molestias en el cuello y, por tanto, cuidará esa zona del cuerpo para llegar lo mejor posible a la carrera japonesa.
"Llevaba protección para el cuello por un nervio pinzado o algo así estos últimos días, pero al final no ayudó mucho porque no di muchas vueltas", explicó Alonso aludiendo a su rápido abandono en el GP de China.