La pareja formada por el salvadoreño Marcelo Arévalo y el croata Mate Pavic superó este sábado al finlandés Harri Heliovaara y al inglés Henry Patten en dos sets, por 7-6 (1) y 7-6 (4), para meterse en la final de las Finales ATP.
Números 1 del ránking de dobles y con el premio a números 1 de la temporada ya asegurado, Arévalo y Pavic dieron el gran salto como binomio en la capital piamontesa. Arévalo nunca antes ha jugado una final de Copa de Maestros, mientras que Pavic perdió la de 2022.
Salvadoreño y croata han formado una pareja muy difícil de vencer en este 2024, en su primer año juntos. Finalistas en Roma, ganaron cuatro títulos en la campaña, incluyendo Roland Garros y el Masters 1.000 de Cincinnati, y lograron además ser los primeros en clasificarse para esta Copa de Maestros.
Solo perdieron en su estreno en estas Finales ATP. Desde entonces, todo victorias. En estas semifinales tuvieron que exigirse al máximo, pues Heliovaara y Patten pujaron fuerte por la victoria. Se decidió todo en dos 'tie-breaks' decisivos en un partido de igualdad máxima.
En la final, Arévalo y Pavic se medirán a la sorpresa del torneo, la pareja alemana formada por Tim Puetz y Kevin Krawietz, octavos cabezas de serie y últimos en clasificarse a Turín, que consiguieron el pase al batir en tres sets, por 2-6, 6-3 y 11-9 a los australianos Max Purcell y Jordan Thompson.
Los alemanes, que ya hicieron historia al ser los primeros de su país en acceder a semifinales, demostraron que en la Copa de Maestros todo puede pasar. Porque ellos, que llegaron como los octavos del mundo y llamados a ser la 'Cenicienta' del grupo, siendo los últimos en sellar su billete a Italia y debutando como equipo en unas Finales ATP, están en la final.
Solo sufrieron una derrota en fase de grupos, en la tercera jornada en la que no se jugaban nada.
Los australianos fueron el rival que mejor les plantó cara. De hecho, con el inicio arrollador de Purcell y Thompson, que se llevaron el primer set por 6-2, el partido parecía en su mano.
Es más, en el segundo, iniciaron con un 'break' que puso contra las cuerdas a los alemanes. La reacción, tan inesperada como efectiva, les hizo sentirse superiores. Recuperaron la rotura y golpear con otro 'break' para mandar el partido al tercer set de manera inesperada.
Allí, en el superdesmpate a 10 puntos, reinó la igualdad. Tuvieron los australianos una bola de partido, pero resistieron Krawietz y Puetz. Dos puntos después, sellaron la victoria. En sus primeras Finales ATP como equipo lucharán por la Copa de Maestros.