El francés Gael Monfils (17) no aflojó para acabar con el chileno Cristian Garín (16) por 7-6(4), 6-1 y 6-3, y hacerse con un billete para los octavos de final del Abierto de Australia.
Garín no pudo convertirse en el tercer chileno de la historia en alcanzar la cuarta ronda en Melbourne Park y sumarse a las hazañas de sus compatriotas Marcelo Ríos (1998 y 2002) y Fernando González (2002, 2007 y 2009).
Por su parte, el parisino, tercer francés de la historia en alcanzar los octavos de final de un torneo ‘major’ en veinte ocasiones y se unió al selecto grupo formado por sus compatriotas Jo-Wilfried Tsonga y Richard Gasquet, siguió con su racha de partidos de ganados, sin contar su derrota ante el brasileño Thiago Monteiro en Adelaida 2 porque se retiró con un set iguales, que empezó tras su derrota en Viena a finales de octubre ante el argentino Diego Schwartzman.
Desde entonces el galo de 35 años sumó nueve victorias y un título que le dan plena confianza para preparar su choque de octavos de final ante el serbio Miomir Kecmanovic, que derrotó a Lorenzo Sonego, 25º cabeza de serie, por 6-4, 6-7(8), 6-2 y 7-5, y pasó a la cuarta ronda de un Grand Slam por primera vez en su carrera.
"Es increíble. Hace una semana tenía que jugar contra el número uno del mundo y no tenía muchas posibilidades allí, pero ahora estoy en octavos de final, así que estoy contento de haber podido aprovechar esta oportunidad y de haber jugado un tenis realmente bueno", dijo Kecmanovic, que actualmente ocupa el puesto 77 del ranking mundial.
La expulsión de Djokovic debido a su estado de vacunación dejó a su compañero de equipo de la Copa Davis para enfrentarse al perdedor afortunado Salvatore Caruso en la primera ronda, que ganó en sets corridos.
A continuación, Kecmanovic se impuso a Tommy Paul y a Sonego, lo que le permitió acceder a la segunda semana del Abierto de Australia.
El joven de 22 años, que aún no ha contactado con Djokovic desde que el número uno del mundo abandonó Australia, está deseando enfrentarse a Monfils por un puesto en los cuartos de final, así como por la oportunidad de tomarse la revancha.
"Será muy difícil", dijo. "Me enfrenté a él en el último torneo de París (en noviembre). Fue un partido duro a tres sets.
"Seguro que va a ser difícil. Él ha jugado bien. Pero yo también he jugado muy bien y tengo este impulso, así que espero que sea suficiente para pasar".