Famosa por el sobrenombre “La Ciudad del Jazz”, Nueva Orleans fue elegida como la sede del Super Bowl 2025, el cual se llevará a cabo el domingo 9 de febrero en el Caesars Superdome, conocido originalmente como Louisiana Superdome.
Además de su legado musical, la famosa ciudad ubicada a orillas del río Mississippi, ofrece una variedad de atracciones para los amantes de la NFL que llegarán en los próximos días para ser testigos del Super Bowl LIX, que se disputará entre los Kansas City Chiefs y los Philadelphia Eagles.
Según un informe de Expedia, agencia de viajes online, debes visitar el Barrio Francés para ver los tranvías que cobraron fama en la obra Un tranvía llamado Deseo, del dramaturgo estadounidense Tennessee Williams.
Otro lugar imperdible, recomendado por dicha agencia, es el Café du Monde, famoso por su café au lait de achicoria y sus beignets de estilo francés, pero si cruzas la calle puedes visitar el parque Jackson Square, donde encontrarás pintores, personas que leen el tarot, lectores, músicos, artistas callejeros y las opciones clásicas de la cocina criolla.
Y si lo tuyo es salir de noche, Bourbon Street, famosa por sus cafeterías, clubes nocturnos, clubes de striptease y bares para escuchar jazz, es la mejor opción, según el reporte de Expedia. Además, en estos establecimientos, se han presentado varios músicos famosos, como Louis Armstrong, oriundo de la popular ciudad.
Nueva Orleans también es conocida por sus raíces, cultura y una historia rica en influencias francesas, africanas y americanas, así que, puedes visitar el Garden District, el Cementerio de San Luis o el Museo Nacional de la Segunda Guerra Mundial, tres destinos recomendados por el sitio web de Chic Magazine.
Nueva Orleans, más fuerte que nunca
El 29 de agosto de 2005, el huracán Katrina impactó en Nueva Orleans, Luisiana, causando graves inundaciones y daños en la ciudad. La tormenta de categoría 3 causó la evacuación de miles de personas, que se refugiaron en el Superdome, sin embargo, los fuertes vientos desprendieron parte de la cubierta exterior del inmueble.
Días después el estadio cerró sus puertas hasta el 25 de septiembre de 2006, fecha en que se dio su reapertura gracias a una remodelación que aproximadamente costó 185 millones de dólares, según datos recogidos por el sitio Primero y Diez.