NNormal, la marca de Kilian Jornet, se ha posicionado en apenas tres años como una de las grandes en la industria del trail running. Sus modelos Kjerag y Tomir son ya habituales en cualquier carrera de montaña. La primera más orientada a corredores rápidos y ligeros, y la segunda mucho más polivalente en cuanto a terreno y tipo de corredor. Sin embargo, la familia NNormal aumenta en este 2025 con el lanzamiento de la Kjerag 2.0 que aún está por llegar, y la NNormal Kjerag Brut que analizamos en esta review.
Y es que la nueva Brut no ha podido llegar en mejor momento: en unas semanas en las que no para de llover en toda la península y con el tiempo suficiente para que todos los corredores que lo consideren se hagan con un par de cara a la mítica Zegama de finales del mes de mayo. Y es que los amantes de la Kjerag pedían a gritos una Kjerag con taco agresivo para el barro, el terreno descompuesto, praderas de hierba, aspectos que abundan principalmente en la zona norte de nuestro país.
Pues bien, dicho y hecho. El pasado año Kilian consiguió su undécima victoria en Zegama y Elhousine Elazzaoui un segundo puesto con un prototipo de Kjerag con suela agresiva, y este año ya tenemos la versión definitiva en el mercado bajo el nombre de Kjerag Brut. Dicho nombre hace referencia a que son unas zapatillas para “ensuciarse” por el tipo de uso al que se destinan, y como guiño a un plato tradicional de Mallorca: Arròs Brut (arroz sucio), llamado así por su color “sucio”, resultado de la mezcla de sus ingredientes.

La NNormal Brut en su terreno favorito, el barro
Datos básicos de la NNormal Kjerag Brut
La Nnormal Kjerag Brut es una zapatilla de competición para distancias cortas y terrenos descompuestos que declaran un peso de 230 gramos, aunque nuestra unidad en talla 44 EUR llega hasta los 255 gramos. La suela completa de Vibram Megarip Litebase presenta unos tacos super agresivos de 6,5 mm para clavarse en el terrenos y garantizar tracción. La mediasuela está fabricada en el compuesto EExpure de la marca, manteniendo los 6 mm de drop de la Kjerag original, y el upper está confeccionado con el Matryx Micro, un material super ligero y con aberturas para drenar el agua.
La suela que te mantendrá en pie cuando los demás resbalen
Para fabricar este modelo NNormal ha trabajado junto con Vibram con el propósito de diseñar la mejor suela posible para terrenos blandos y descompuestos. Así, encontramos el compuesto Vibram Megarip con la versión Litebase, es decir, la garantía del mejor agarre y adherencia con el mínimo peso posible.
Los tacos de 6,5 mm se reparten a lo largo de toda la suela, a excepción de la zona media donde se estrecha al máximo y podemos ver claramente el sello amarillo de Vibram. En la parte delantera observamos tacos grandes y angulosos, sobre todo en los laterales para asegurar el agarre en los apoyos más comprometidos. En la parte trasera los tacos varían su forma estratégicamente para garantizar la retención en las bajadas.

Suela de la Kjerag Brut
Sin duda, con esta suela -específica para este modelo- se ha hecho un estudio y análisis muy profundo para obtener un producto con garantías para estos terrenos más complicados, aspecto que ya adelantamos que se ha conseguido y nos ha dejado con la boca abierta.
Matryx Micro en el upper para repeler y drenar el agua
El upper de esta Kjerag Brut es uno de los grandes responsables de lo espectaculares que son estas zapatillas, ya que de poco sirve que tengamos la mejor suela si luego el upper coge peso al mojarse y no expulsa el agua. Con el compromiso que tiene la marca con la durabilidad, en esta Brut han apostado por el tejido Matryx, pero con una versión mucho más ligera, ventilada y prácticamente transparente: el Matryx Micro.
El objetivo es que la zapatilla sea capaz de dejar entrar y salir el agua sin coger peso, manteniendo sus propiedades de resistencia y durabilidad. Para ello también se vale de unas pequeñas aberturas en la zona media y delantera del pie para ayudar a expulsar el agua.
El tejido está decorado con unos brochazos grises que simulan las salpicaduras de barro típicas al correr por estos terrenos, lo que le imprime un carácter salvaje a la zapatilla. En la puntera encontramos un refuerzo plástico mínimo y en el talón es algo más fuerte, pero igualmente muy minimalista, ya que podemos doblar el contrafuerte con las manos fácilmente.

Collarín de carácter minimalista
El collarín sigue con esta línea minimalista y es prácticamente testimonial con un acolchado mínimo y forma anatómica para adaptarse a la morfología del corredor. La lengüeta va unida a los laterales a modo de calcetín interior, pero en este caso llega casi hasta el talón abrazando muy bien el pie con un tejido muy agradable y cómodo. Por su parte los cordones son planos y estriados, lo que permiten un atado consistente.
Por último, es importante reseñar que la horma es estrecha de medio pie a talón, pero que en la parte delantera, sin ser ancha, deja algo de movilidad a los dedos, por lo que no se siente muy agobiante, y también que no contamos con plantilla extraíble en el interior. Zapatilla para competir donde menos es más.

La horma de la NNormal Kjerag Brut es más bien estrecha.
Compuesto EExpure en la mediasuela: si algo funciona… ¿Para qué cambiarlo?
Para el modelo Brut, NNormal ha querido mantener el compuesto super crítico EExpure en la mediasuela que ya conocimos en la primera Kjerag. Un material que retorna mucha energía a la vez que aporta una amortiguación firme para sentir el terreno y tratar de dominarlo lo mejor posible, manteniendo los 6 mm de drop.
Gracias a que este modelo está diseñado para terrenos embarrados y sueltos, contar con este compuesto permitirá a la gran mayoría de corredores estirar más la distancia que la primera Kjerag, siendo una gran opción para cortas distancias en términos generales y para largas en aquellos corredores más privilegiados.
En carrera con la Kjerag Brut: Recomendaciones y conclusiones
Al principio es una zapatilla difícil de calzar, ya que al tener un collarín tan minimalista es algo costoso introducir el pie hasta que se le pilla el truco. Una vez entra el pie y encaja, verificamos un ajuste realmente perfecto. Es importante dedicar un tiempo a colocar bien la lengüeta y estirarla para que no deje arrugas. Como la tela interior que la une a la mediasuela llega hasta bastante atrás, notaremos que nos envuelve muy bien el pie.

La mediasuela es más reactiva que amortiguada
El talón es bastante plástico y maleable, pero es posible que en las primeras salidas nos haga algún amago de roce hasta que se adapte a nuestro pie. Los cordones permiten un ajuste literalmente perfecto, sin embargo recomendamos encarecidamente el uso del último ojal para hacer la lazada extra. Sin ello, el ajuste ya es bueno, pero así evitamos que se abra un pequeño pliegue en el collarín por el que podrían entrar elementos del terreno. Al ser una zapatilla pensada para terreno suelto, es frecuente que esto ocurra, y de esta manera lo evitamos.
Las primeras salidas con ellas fueron por su medio natural. Las lluvias de las últimas semanas parecían predestinadas a esta zapatilla, y las primeras sensaciones fueron espectaculares por el barro, hasta tal punto que parecía que el terreno se hubiera secado. No hay que olvidar que estamos ante una zapatilla de competición, con todo lo que ello supone. Es muy ligera, cuenta con poca estructura y tenemos una mediasuela más reactiva que amortiguada, por lo que hay que ser cauto.
Bien es cierto que al estar diseñadas para terrenos blandos, podemos estirarlas más distancia que a la Kjerag convencional, pero generalmente la recomendamos para la corta distancia y solo a la larga distancia para unos pocos elegidos, ya que exigen al corredor poseer una buena técnica y condición física para exprimirla.

Detalle del taqueado de la suela en su parte delantera
Terrenos embarrados, arcillosos y rotos
Correr con la Brut por estos terrenos es una auténtica delicia y la suela tiene gran culpa de ello, ya que literalmente supone una ventaja competitiva, ya que cuando los demás no se tienen en pie, tú te puedes abrir paso con la Brut. Al principio es una sensación de sorpresa a la que rápidamente te acostumbras. La tracción es brutal. En subida, en bajada, en llano, la suela se clava al terreno y te permite avanzar sin resbalar con una seguridad pasmosa.
Además, la suela evacúa bastante bien el barro muy húmedo, aunque ese tipo de barro arcilloso y pegajoso que todos conocemos que se pega a la suela y la bloquea completamente, también lo hace en la Brut. Lo bueno es que al ser una zapatilla ligera, ese exceso de peso no es tan desagradable como con otras zapatillas, y además, al cambiar de terreno la suela lo expulsa rápidamente.
La verdad es que la sensación al correr con esta zapatilla es que da igual lo que nos encontremos en el camino, que lo vamos a solventar. De hecho, los terrenos que se suelen querer evitar normalmente con la Brut los buscarás, y cuidado, que los disfrutarás.

El terreno embarrado es el que mejor se adapta a la Brut
Terrenos secos y pisteros
¿Y qué ocurre en terrenos secos, zonas de piedra o caminos y pistas fáciles? Pues bien, como cualquier zapatilla específica, sacada de su finalidad, va a penalizar un poco. En zonas rocosas se desenvuelven bien, ya que la suela tiene una adherencia muy alta, y al tener bastante superficie plana en los tacos, no vamos a tener problema, pero es verdad que acelerará el desgaste de los propios tacos, por lo que si es algo puntual no hay problema, pero no es una zapatilla para ese terreno.

La Brut es una zapatilla diseñada para la competición
Lo mismo ocurre con senderos secos, caminos fáciles o pistas forestales. Puntualmente podemos transitar por estos terrenos sin problema, pero no de forma habitual, ya que para eso tenemos la Kjerag convencional.
El upper, por su parte, nos ha encantado. El agua de los charcos entra en la zapatilla tan fácil como sale, ya que el Matryx Micro es prácticamente transparente, y además los orificios de drenaje que encontramos en la mitad delantera de la zapatilla funcionan a la perfección. Recomendamos utilizar un calcetín ligero, ya que eso será todo lo que coja agua dentro de la zapatilla. La opción de utilizar sin calcetín no la vemos muy acertada, pero esto irá en función de las preferencias de cada corredor. Además, el tejido es altamente resistente a los roces, por lo que la durabilidad está garantizada.
Veredicto final
No es de extrañar que un producto avalado por NNormal funcione tan bien, pero es que realmente la Brut es la zapatilla perfecta para competir en terrenos blandos, rotos y resbaladizos. La suela te permite tener confianza venga lo que venga, con un upper super ligero, hidrófugo y resistente que conforman un conjunto realmente ligero, que sumado a la mediasuela de EExpure, permite volar por senderos “sucios” con total seguridad.

El PVP de la NNormal Brut es de 200€
Pros y contras
Pros:
• Una suela sin precedentes que permite traccionar en los terrenos más complicados donde más se necesita con la máxima garantía.
• El upper super ligero e hidrófugo consigue que la zapatilla no coja peso al mojarse y expulsar el agua de forma inmediata sin perder resistencia ni durabilidad.
• La mediasuela super crítica de NNormal permite volar literalmente por los senderos por muy accidentados que estén.
Contras:
• Su uso puede verse limitado al ser una zapatilla muy específica para un tipo de terreno.
• La zona del interior del talón presenta una costura que podría llegar a molestar en algún caso o hacer rozaduras.
• Quizá si el tejido aportase algo más de estructura, el público objetivo podría ser mucho mayor.

El drop de la NNormal Brut es de 6 mm
Ficha Técnica de la NNormal Kjerag Brut
Tipo de zapatilla: Competición y entrenamientos de calidad.
Terreno: Embarrado, suelto, descompuesto, blando, mojado, nevado, “sucio”.
Distancia: Corta distancia en general y en casos excepcionales también larga.
Corredor: Preferentemente corredores ligeros con capacidad de correr rápido y buena técnica.
Drop: 6 mm
Peso: 230 g
Precio: 200 €