El estadio Rajko Mitic, escenario del Estrella Roja-Barça, es conocido popularmente como el ‘Pequeño Maracaná’, un temible infierno para los rivales del equipo serbio. Lamine Yamal, Dani Olmo, Pedri y el ahora lesionado Ferran Torres lo conocen bien porque España jugó la selección nacional serbia en la primera jornada de la Nations League, poco después de proclamarse campeona de Europa. No habrá, sin embargo, el apoyo del público azulgrana.
La casa del Estrella Roja, que tiene capacidad para 51.755 espectadores, fue construido en 1963, ha vivido momentos clave en la historia del fútbol mundial y también en la de la española. El 30 de noviembre de 1977, hará 47 años, la selección de Kubala se impuso (0-1) a la extinta Yugoslavia y se clasificó para el Mundial de Argentina de 1978. El encuentro fue conocido después como ‘la batalla de Belgrado’ y es recordado por el célebre gol de Rubén Cano y también por el botellazo a Juan Gómez, ‘Juanito’. Aquel día, los hombres de Kubala sufrieron entradas muy duras, pero terminaron sellando la clasificación mundialista. En las horas previas al encuentro se vivieron horas de tensión. Ruido y alborotos en las inmediaciones del hotel de concentración para impedir el descanso de la plantilla.
Con la autorización de Tito, el presidente de la República Federal socialista de Yugoslavia, el encuentro se jugó a las 13.30 horas de un día que se decretó como festivo para que se llenasen las gradas. El choque, cuentan las crónicas, fue extremadamente violento. Viendo la tensión, Kubala retiró a Juanito. Cuando abandonaba el campo, el jugador levantó su mano derecha con el pulgar hacia abajo. De repente una botella impactó en su cabeza y cayó redondo al suelo perdiendo el conocimiento. Pasaron muchas cosas. Un público mostrando mucha ira, perros de seguridad dentro del campo y las sospechas de Kubala hasta el punto que el equipo podía ser envenenado y se llevó todos los productos nacionales.
La penúltima Copa de Europa (1990-91), antes de adoptar la denominación de Champions League, está, precisamente, en el Rajko Mitic. Meses antes de que estallase la guerra de los Balcanes, el Estrella Roja logró la gesta de conquistar el mayor hito de la historia del fútbol yugoslavo. Fue la última Copa de Europa sin fase de grupos, con un club de la Alemania Democrática, el Dynamo Dresden, y un club de la Alemania Federal, el Bayern de Múnich. En semifinales había eliminado al Bayern de Múnich (1-2 y 2-2) y en la final ante el Olympique de Marsella, en el Stadio San Nicola de Bari. El encuentro acabó en igualada sin goles y en los penaltis marcaron Prosinecki, Binic, Belodedici, Mihajlovic y Pancev.
Pero si hay un episodio del Barça ligada a aquel estadio y al Estrella Roja es la que nos remonta al 20 de octubre de 1982, en la victoria azulgrana por 2-4 en el estadio yugoslavo. Así lo explicó Mundo Deportivo el viernes 22 de octubre de 1982.
Diego Maradona esculpió uno de sus mejores goles vestido de azulgrana. El crack argentino se deshizo de dos de sus marcadores, Jovin y Rajkovic, conduciendo el balón con su depurada técnica hasta llegar al semicírculo de la frontal del área. Entonces, viendo adelantado al portero Stojanovic, dibujó una vaselina perfecta. En unos pocos metros de distancia, el balón cogió una altura inaudita en ese arte del juego. Aquel gol maravilló a la afición local que, puesta en pie, no dejó de aplaudir al entonces jugador azulgrana. “Ciertamente es uno de los goles más bonitos que he marcado en mi vida, sólo comparable a uno que conseguí con Argentina ante una selección del resto del mundo. Agradezco a la afición de Belgrado su comportamiento”, comentó el propio jugador a la conclusión del partido.
El 5 de septiembre de este 2024, la selección española jugó en este estadio aunque no pudo pasar de un empate sin goles. En la formación titular estaban Lamine Yamal en el extremo derecho y Dani Olmo en la mediapunta, igual que ahora en esta Champions.

Gol de Maradona en el Estrella Roja-Barça de la Recopa 1982-83 en el Pequeño Maracaná de Belgrado
Balance equilibrado en las cinco visitas culés
El Barça visitará por sexta vez al Estrella Roja. El balance en Belgrado hasta ahora es de dos victorias culés, un empate y dos derrotas. En el primer desplazamiento, Zaldúa y Pereda sellaron el 0-2 culé en la ida de ‘semis’ de la Copa de Ferias 1961-62. Los serbios ganaron en los dos siguientes precedentes: 1-0 en la ida de octavos de la Copa de Ferias 1962-63 y 3-2 en el desempate, que dio el pase a los balcánicos. En la ida de octavos de la Recopa 1982-83, 2-4 con sendos dobletes de Maradona y Schuster y en la vuelta de dicha ronda del mismo torneo de la 1996-97, 1-1 con un tanto de Giovanni.