Los calambres musculares son contracciones o espasmos súbitos, involuntarios que se producen en uno o más músculos del cuerpo, según los expertos de Medline Plus.
Se trata de una afección común que ocurre muchas veces tras haber practicado ejercicio físico. En muchos casos se producen en las piernas y por la noche.
Cuando un musculo sufre un espasmo se contrae sin control y no se relaja, provocando una sensación de nudo en el cuerpo. Estos calambres pueden ser dolorosos y durar desde unos segundos hasta varios minutos.
Todos los músculos del cuerpo pueden sufrir un calambre muscular, pero los más frecuentes son los muslos, pies, manos, brazos, abdomen y los músculos de la caja torácica.
Causas de los calambres musculares
Los expertos de Medline Plus señalan que los espasmos musculares se producen cuando un músculo está sobrecargado o lesionado.
Además, los factores que podrían causar un espasmo muscular incluyen:
- Tensar u ocupar demasiado un músculo, siendo ésta es la causa más común.
- Compresión de los nervios, por problemas como la lesión de la médula espinal o un nervio pinzado en el cuello o la espalda.
- Deshidratación tras haber realizado ejercicio.
- Bajos niveles de minerales como magnesio, potasio o calcio.
- Músculos con poca irrigación sanguínea.
- Embarazo.
- La toma de ciertos medicamentos.
- Someterse a diálisis.
Existen algunos espasmos concretos que pueden estar asociados con una causa, por ejemplo, una hernia discal puede irritar los nervios raquídeos y causar un calambre en los músculos de la espalda.
Por otro lado, los espasmos en la pantorrilla suelen producirse tras practicar natación o correr; en la parte superior de la pierna por realizar actividades como correr o saltar; y en el cuello puede ser un signo de estrés. En algunas ocasiones, se desconoce completamente la causa de estos calambres musculares.
Cuándo visitar a un médico por un espasmo muscular
Los calambres musculares son inofensivos y suelen desaparecer tras unos minutos. Pero, en algunas ocasiones, es necesario contactar con un médico.
Así, se debe visitar a un profesional de la salud si los espasmos son severos, si ocurren muy a menudo, si no mejoran con estiramientos ni bebiendo suficiente líquido, si duran mucho tiempo, si vienen acompañados de hinchazón, enrojecimiento o sensación de calor, o si están acompañados de debilidad muscular.
Por otro lado, cualquier persona puede sufrir un calambre muscular. Sin embargo, esta afección es más común en:
- Adultos mayores.
- Personas con sobrepeso.
- Atletas.
- Mujeres embarazadas.
- Personas con ciertas afecciones médicas, como enfermedades de la tiroides y nerviosas.
¿Cuáles son los tratamientos para los calambres musculares?
Si el médico le diagnostica un espasmo muscular, generalmente, no será necesario un tratamiento para éste.
Sin embargo, los expertos de Medline Plus aseguran que se puede encontrar alivio de los calambres al llevar a cabo algunas rutinas:
- Estirando o masajeando suavemente el músculo.
- Aplicando calor cuando el músculo está tenso y hielo cuando el músculo provoca dolor.
- Bebiendo más líquidos en caso de deshidratación.
Por otro lado, existen medicamentos que los especialistas recetan para prevenir los calambres, pero los expertos alertan que no siempre son efectivos y pueden causar efectos secundarios, por lo que es importante informarse bien.
Una manera de prevenir los espasmos musculares es haciendo estiramientos antes de hacer ejercicios o antes de acostarte, beber muchos líquidos e incrementar la ingesta de potasio.