El PSG de Luis Enrique Martínez no pudo pasar del empate contra el Auxerre (0-0) y alimenta sus dudas antes de la 'final' que jugará en Champions League ante el Salzburgo entre semana.
Durante el último mes la situación de los parisinos y del técnico español, especialmente tras caer en Champions ante el Atlético de Madrid con el que también se verá las caras en el Mundial de clubes, y contra el Bayern, está siendo compleja, pues a falta de tres jornadas para que concluya la liguilla de la Champions tienen 4 puntos y les queda jugar contra Salzburgo, City y Stuttgart. Además, en liga tampoco está pudiendo brillar.
Ante el Auxerre, con Donnarumma otra vez bajo palos igual que la jornada anterior después de tres partidos sin jugar y con Dembélé en el banquillo, ‘castigado’ desde su expulsión contra el Bayern, los parisinos monopolizaron la pelota de principio a fin, pero con una alarmante falta de puntería.
En la primera parte se pudieron adelantar varias veces, pero como viene siendo habitual esta temporada, marcan pocos goles para todo lo que generan. Fabián disparó alto, Ramos falló una ocasión clarísima con la cabeza en la que ganó a todos por arriba, pero León voló para sacársela, y cuando parecía que se adelantaban en un pase de la muerte de Barcola a Fabián, la acción quedó anulada por fuera de juego. Tampoco tienen suerte.
Lo siguieron intentando antes del descanso, pero los tiros de Barcola salieron desviados.
León se hizo enorme bajo palos
En la segunda parte entró ya en juego la ansiedad y la necesidad de ganar. Una ansiedad que nunca trae nada bueno y hace que te precipites en la toma de decisiones finales. El PSG está echando muchísimo de menos la categoría de Kylian Mbappé.
Hakimi insistió por la derecha, poniendo un balón al área que de manera incomprensible Ramos no convirtió en gol. Se chocó con León. Poco después Kang In- Lee se encontró también con el francoguayanés que vivió una de sus mejores noches como profesional.
Luis Enrique, desesperado, agitó el árbol. Introdujo en el campo a Dembélé, Kolo Muani y Doue por Barcola, Ramos y Kang. Pronto la tuvo Muani, que tampoco entró con puntería. Otros jugadores, mismos resultados.
Pudo complicarse todavía más el asunto cuando Donnarumma sacó un mano descomunal a un tiro de Sinayoko. Entró el partido en un intercambio de golpes en el que pudo pasar de todo. Ya en el descuento la tuvo sobre la bocina Kolo Muani en un mano a mano en el que no pudo superar a León. El PSG y su problema con el gol no cesa.
